LA VERDAD SOBRE EL
CASO HARRY QUEBERT
"Anhele el amor, Marcus. Haga de él su más hermosa
conquista, su única ambición. Después de los hombres, habrá otros
hombres. Después de los libros, hay otros libros. Después de la
gloria hay otras glorias. Después del dinero, hay más dinero. Pero
después del amor, Marcus, después del amor, no queda más que la
sal de las lágrimas."
Podría concluir que esta cita junto con otras dos es lo que me llevo
de la novela. Con ello no quiero decir que no me haya gustado o que
no la recomiende. Pero hay varios aspectos que creo son importantes
de matizar antes de que la leáis:
La incóginita a desvelar en la historia es ¿quién mató a Nola
Kellergan? Una joven de quince años desaparece en Aurora, New
Hamphire, en el verano de 1975 y en extrañas circunstancias. 33 años
después un joven escritor, Marcus Goldman, desesperado por la falta
de inspiración va a visitar a su mentor, Harry Quebert, en busca de
su ayuda a esta misma ciudad. Es en este momento cuando descubre que
su admirado profesor tuvo una relación con una chica muy joven, de
la cual aparece el cadáver enterrado en el jardín de su casa.
Aunque parezca que acabo de destripar la novela, esto no es más que
el principio de una larga sucesión de acontecimientos que se van
dando mientras Marcus intenta descubrir y defender la inocencia de
Harry y averiguar quién fue el responsable del asesinato.
Tuve muchas ganas de leer esta obra. Allá por donde iba me la
recomendaban, pero el poder de convicción lo tuvo un librero que, en
el paseo de una playa maravillosa, entusiasmado, me dijo que tenía
que leerla. Ante tal escenario, como resistirme...
La verdad sobre el caso Harry Quebert es
un thriller denso, largo y con un alto poder adictivo casi desde el
principio. Ahora que están tan de moda las novelas de este género
podríamos decir: "una más", pero
lo cierto es que en ella hay ciertos detalles novedosos y originales
que en otros libros similares no aparecen. Esa originalidad, en mi
opinión, cuando mejor se emplea es en el comienzo de cada capítulo
donde Harry Quebert da una serie de consejos a Marcus sobre la
escritura, el amor y el boxeo (recurso bien utilizado en la historia
casi como metáfora de la vida).
Otro aspecto a resaltar son los giros temporales. Trama contada en
tres épocas (1975-1998-2008) que para ser franca, me gustó más en
la primera mitad de la novela, ya que después son tan constantes los
cambios de ritmo (imagino para hacer la historia menos predecible)
que llega a cansar al lector, espero que no a perderlo...
La trama está bien orquestada, pero
me quedo con la sensación de que el autor ha querido alargarla a
toda costa. Me explico: hay partes del argumento que perfectamente
podrían sacarse tal cual de la novela sin que afectara demasiado al
resultado, y de camino hacer un telefilm de esos de bajo presupuesto
que se pueden ver en la sobremesa del sábado. Hay partes que al
querer introducirle humor quedan por debajo del nivel de la novela en
su conjunto. En la narrativa no se puede equiparar a grandes autores.
Se me viene a la cabeza Khaled Hosseini, autor de Cometas
en el cielo, que con la
sencillez por bandera hace que la narración de una historia sea
bella por sí misma y nos introduzca en ella sin dificultad, pero
también sin mediocridad. A veces, también en literatura, menos es
más.
Puede parecer que La
verdad sobre el caso Harry Quebert
no me ha gustado nada, pero no es así. Admiro enormemente la
capacidad de Jöel Dicher para que deseemos irremediablemente saber
quién mató a Nola Kellergan. De las que yo he leído hasta ahora,
me parece la mejor novela que puedan leer aquellas personas que aún
no sienten esa emoción indescriptible, esa sensación de vivir otras
vidas (que acaba convirtiéndose en necesidad) cuando abren un libro.
Estoy segura que con esta historia aparecerá ese "gusanillo",
sólo por eso os la recomiendo.
Mercedes Suero Fernámdez
24 de Octubre de 2013
Buenas tardes Mercedes¡¡¡¡
ResponderEliminarTe dije ayer que leería tu entrada y aquí estoy. He leido tus comentarios acerca del libro y sinceramente me has dejado con ganas de descubrir que le pasó a la chica Nola Kellergan. Hablas de la novela sin destripar la historia que encierra en su interior. Sinceramente la leeré y entonces ya te comentaré más concretamente.
Bueno, enhorabuena por tu blog y ya estamos en contacto.
Saluditos
Mónica
Muchas gracias Mónica, cumples con tu palabra!! jeje. Espero que cuando te leas la novela me digas tus impresiones. Un saludo!
EliminarYo que ahora ando también enredado con la novela negra, no sé si esta que nos dejas podría encuadrarse dentro de esa categoría, entiendo perfectamente eso que comentas de la adicción que determinadas historias son capaces de generar.
ResponderEliminarOtra cosa que has comentado me ha hecho pensar. Y es que yo creo que en literatura no a veces sino en la mayoría de las ocasiones menos es más. Es difícil a veces para algunos autores no extenderse más de lo necesario, no inflar la historia con piezas que, como tú bien dices, suelen estar por debajo de el armazón principal que sostiene la historia.
Por lo que me cuentas o, más bien, por lo que yo entiendo, se trata de un libro tolerable, que se deja leer pero sin que sea para tirar cohetes. Así que seguiré mi propio camino de investigación entre detectives y muertes rocambolescas.
Un beso!
¡Qué bien te explicas! Justo eso quería decir. Parece que estás de acuerdo conmigo... Entre tú y yo y conociéndote: puedes atrasarlo en tu lista de lecturas pendientes.
ResponderEliminarUn besazo!!